Noticias de Cantabria
Editorial 27-12-2017 22:52

La sequía

Nosotros no vamos contra corriente, nunca, pero es ahora cuando cae más agua debemos recordar y tener presente la sequía que hemos padecido, no desaparecida aún de nuestro territorio, que otrora se llamaba la pequeña Suiza, la Tierruca, la Montaña y ahora Cantabria.

La sequía está ahí y esperamos que consigamos superarla mientras siga cayendo agua y nieve y llenar el pantano del Ebro que ahora se encuentra a un nivel de un 34% de su capacidad.

Todos estamos de acuerdo que el agua es un bien fundamental para la supervivencia del humano y, por tal motivo, debemos valorar ese líquido elemento, por encima de cualquier otra cuestión, que a veces desperdiciamos y otras ni lo consideramos. Los ríos cántabros en estas ultimas fechas  bajan a rebosar y esa agua va directamente al mar desperdiciándose en su totalidad. En los años  ochenta del siglo pasado se  habló de construir un embalse  en el alto del Pas y se canceló la idea-proyecto por unanimidad.Corría el año 1987 y la Asamblea Regional de Cantabria aprobó por unanimidad una proposición no de ley presentada por el CDS -a través de su diputado Manuel Garrido- contraria a la proyectada construcción de una presa en la cuenca del río Pas……

No quiero entrar en polemizar sobre esa idea, que quizá ahora se miraría con otros por la población porque vemos que era para prevenir lo que nos ha pasado. Alguien pensó en clave de futuro, pero aquí en nuestra Cantabria infinita existe para la innovación una respuesta peblerina y miope de toda la vida. No. O el dicho tan popular de, "si yo no puedo, tú tampoco". Esa filosofía del No ha producido que nuestra tierra otrora "Tierruca" haya bajado en proyección de crecimiento con el trascurso de los años de ser una Comunidad puntera a bajar escalones año a año.

A la Presa del Pas unimos el Museo Guggenheim que se intentó instalar en Santander y se dijo "No" y el Centro Botín que se dijo "No" y ni sé cómo se ha construido. Si lo sé, porque se le metió en la cabeza a Don Emilio Botín regalarnos ese Centro que ya es motor cultural de nuestra ciudad, pero los de siempre dijeron "No".Recapitulando debemos de plantearnos, no ya esa presa, que también, sino pensar ante las próximas sequias que vendrán. ¿Una planta desalinizadora? ,¿pequeñas presas,embalses?, cualquier cosa menos seguir permitiendo que esa riqueza, el agua, se vaya al mar en su totalidad. Desde aquí lanzamos ese grito para la concienciación de nuestra sociedad que ya es mayor de edad y no manipulable como lo era la Cantabria de los caciques, algunos quedan y poderosos y se mantienen en sus descendientes. Felices fiestas.

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