Alejandro Ortea y la memoria histórica

Pues hagamos memoria histórica en este fin de semana, que para eso estamos. Don Alejandro fue cuatro años el poderoso Jefe de Gabinete del Consejero Pesquera -el de los viajes con el que el anterior despachaba sus andanzas en Santander en Parayas cuando el Pesquera aterrizaba de sus viajes- ,reponía la tarjeta de crédito y volvía a emprender el paseo en busca del objeto del deseo: el famoso I+D+I.

Nadie puede negar que Ortea era un gran trabajador, porque llevar la Consejería de Industria, todas las sociedades públicas mixtas, Sodercanes, etc., mientras su señorito viajaba era bastante complicado. Curiosamente desapareció y nadie le hizo ninguna auditoría, ni examinó sus números para que su sustituto Del Olmo, que venia del Puerto, aunque todo quedaría en casa.

Sólo un pero, que debería de haberlas hecho tan gordas, el ciudadano de a pie no tiene acceso a ellas, que hasta Lola tuvo que anular el decreto por él redactado para legalizar las televisiones o la televisión en donde obtuvo cobijo: TeleCabarga.

Previamente, pasó y puso precios de construcción y manejó a su antojo el Polígono Morero, donde construía naves ASCAN, al igual que en la recta de Heras. Sólo que los precios del metro cuadrado de Morero eran más caros que el de Heras, ¿me siguen?

Por lógica y economía empresarial, las naves de Heras se venderían mejor y antes que las de Morero, a través de Sican, que también se vendieron. Cuando dimitió de 'súper secretario' de Industria, que no le echaron, ¡qué desagradecidos! Ni tan siquiera del Olmo ni Pesquera le hicieron una comida de despedida ni le regalaron un reloj de imitación, como se hace a los buenos y probos funcionarios.

Pero se fue, le dijeron que se fuera o le echaron. Lo que sí les tengo que decir es que Ortea sabe mucho de todo y está tranquilo. Sabe tanto que recaló en la empresa que se pretendía legalizar con su decreto -Tele Cabarga- con vinculación empresarial a la que construía las naves en el Polígono de Morero.
Pero si les más cuento van a saber mucho y tengo que guardar cosas para seguir y alegrar las elecciones en las que estamos.