Por el amor de una mujer.........¡¡ Carlos Magdalena

El que aquí escribe cuando sonaba esta canción estudiaba en Barcelona, en aquella época la ciudad Condal era faro del Mediterráneo, trasiego de culturas que llegaban y enriquecían la ciudad y a sus habitantes, y no se les obligaba a hablar ni rotular en catalán como hacen estos independentistas de pacotilla de última hora.Era una sociedad, abierta, afable y se convivia sin miedos

Han pasado muchos años, demasiados, y esa canción que escuchábamos por todas partes ha recobrado su popularidad porque nunca murió y ahora algunos la asociamos con "Pedro el bello" y la dinámica en la que él solo se ha metido ofendido por las acusaciones hacia su esposa. Una nueva  decisión tan contradictoria, confusa y negativa para España como viene haciendo día sí día también.
Recuerden que la espita de la salida de pato de banco de Pedro Sánchez Pérez Castejón fue el anuncio vía red social anunciando a los españoles que estaba agraviado porque a su mujer, que ha estado por la política y por la empresa enredando como gallo sin cabeza, la estaba investigando por corrupción un juez valiente y es que dicen que de esos polvos vienen estos lodos. Ante tal osadía Sánchez se ha volcado en defensa de su mujer y como dice la canción

"Por el amor de una mujer
jugué con fuego sin saber
que era yo quien me quemaba
Bebí en las fuentes del placer"(Dany Daniel)

Al querer un juez cuasi jubilado valorar si la Bego ha infringido el Código Penal Pedro Sánchez le ha dolido o "le han hecho dolerse" pero lo cierto es que solo ha sido la espita de esta dimisión en diferido del señor Sánchez Pérez Castejón para marcharse un ratito y de paso dejarnos en ridículo delante de Europa. Lo cierto es que con marcha o sin ella ha dejado una estela de problemas provocados sólo por él, por su soberbia, por sus grandezas personales y por empeñarse en gobernar con el único fin de continuar en Moncloa. Esta "amenaza"  ha sido una más de sus ocurrencias y muestra de su personalidad egocéntrica dejando el país paralizado.

No vamos a repetir todos los problemas en los que estamos enfangados y que durante cinco días el Presidente ha olvidado, y todos con una difícil solución.  España-Nación se encuentra en un laberinto de pequeños estados en donde nos han metido esta gente que apoya a Pedro Sánchez por interéses espurios. Desde unos amnistiados dispuestos a repetir las fechorías pasadas por las que fueron condenados hasta el regreso de un prófugo de la justicia que opta a ser presidente de Cataluña, en fin una sinrazón ininteligible para cualquiera con un poquito de dignidad. Primero fue Zapatero con su confusa declaración en Cataluña antes de ser presidente diciendo que lo que aprobase el Parlament sería concedido, luego recurrido al Constitucional y montándose una confusión de la hostia. Llegó Rajoy con mayoría absoluta para que pusiese pie en pared pero no hizo nada salvo entregar por cobardía el poder a Sánchez y no supo poner las cosas en su sitio.  Y ahora este hombre ha dado el remate final con su amnistía a modo de salvador vendiendo una convivencia falsa y provocando un desastre en la España constitucionalista.
Difícil lo tiene nuestro país porque habría que meter la tijera y eso el radicalismo-independentismo y comunismo que tiene tomado las calles lo va a impedir e incluso hasta pondría un muerto encima de la mesa, si fuera necesario.

Y  después del patético culebrón el remate final ha sido acudir a la Zarzuela y decirle al Rey que ya ha reflexionado consigo mismo, aconsejado por su mujer la Bego que le ha dicho que siga para a continuación dar unos mensajes ante la ciudadanía de cómo hacer una política respetuosa sin insultos ni agravios. Definitivamente y como dice otro de su misma condición, el señor Oscar Puente, "es el puto amo" pero de la infamia.

¡Me duele la España que conocí y que estos últimos presidentes se la han cargado!

La única esperanza que nos queda a muchos ciudadanos es que confiamos en que al estar unidos a Europa ésta impida un desastre total, en la medida de lo posible, porque estamos metidos en un lodazal difícil de salir y el que quiera librarse de Sánchez y sus secuaces, que no se irán por "muchas presuntas ofensas"  que reciban, tendrán que auto exiliarse como en tiempos de Franco. ¡Qué país!