28-02-2010 21:00
Aires frescos y de esperanza en el PSOE de la capital
Los resultados electorales producidos en el seno de las agrupaciones socialistas de la capital de Cantabria con la pérdida de poder de su todavía secretaria general Rosa Inés García, con un margen bastante amplio hacen concebir esperanzas de un cambio profundo en el socialismo santanderino y consecuentemente en el de Cantabria.
Los resultados electorales producidos en el seno de las agrupaciones socialistas de la capital de Cantabria con la pérdida de poder de su todavía secretaria general Rosa Inés García, con un margen bastante amplio hacen concebir esperanzas de un cambio profundo en el socialismo santanderino y consecuentemente en el de Cantabria.
La convocatoria electoral despertó el interés de los afiliados a la vista del elevado número de participantes pese a que de forma permanente se haya venido arrastrando en estos procesos internos una apatía tanto por falta de un liderazgo claro como por la ausencia de un debate serio y profundo que necesita el socialismo local.
La derrota de Rosa Inés García, en un proceso transparente y con alta participación, no deja dudas de lo que quieren los socialistas santanderinos. Atrás quedan muchos años de oscurantismo, trapicheos, promesas y amiguismos, utilizados siempre no en interés del bien del partido, sino en beneficio propio de una familia y un determinado sector. Ese dicho de “O estás conmigo a estás contra mi”, que tanto ha funcionado en el seno del PSOE debe quedar en el olvido para siempre. Rosa Inés, a la que nadie puede negar su capacidad de entrega y trabajo, deberá entender que ya no valen maniobras ni estratagemas para mantenerse en el poder al precio de lo que sea. Su tiempo, para bien o para mal, ha pasado y ahora se vislumbran nuevos plazos con otros militantes.
Los cambios de personas en las nuevas listas han recibo un aval para dar un giro total en el funcionamiento interno del PSOE que restablezca el debate interno, la confianza entre los compañeros, y se prime, por encima de todo, la valía, preparación y entrega de los militantes, y se deje a un lado el amiguismo, y el servilismo que tan nefastos resultados ha traído al socialismo de la capital.
Es hora de cambio y renovación en el PSOE, así lo han elegido sus militantes que con su voto han impulsado un aire fresco a la organización. Los cambios de personas y sus talantes, con postulados claramente democráticos y defensores del debate interno, puestos de manifiesto en el pasado proceso congresual del partido, aunque luego no se plasmaron en las listas y en el reparto del poder, hacer concebir tiempos de esperanza para el socialismo en Santander. Así lo manifestaba el sábado un histórico militante tras conocer los resultados y la derrota clara de Rosa Inés.
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Comentarios(9):
Vamos a ver creo amigo que usted ha perdido fuelle Se nota que es socialista y me alegro porque en este periodico el editor y me consta no censura a nadie .No ocurre lo mismo con sus compis que me consta que censuran y atacan por sus opiniones al editor de Cantabria Liberal.Lo de aires de esperanza no se muy bien a que se refiere.Soy socialista y aqui lo unico que se piensa y se vive es que el pacto con Revilla se reedite aunque nos vayamos al carajo Se trata amigo del poder por el poder y ese no es el socialismo que yo conozco y que mamé.Ni rosa Ines representa nada,salvo atacar a Lolita ni esta representa nada salvo seguir las instrucciones que emanan de Madrid y tratar de conseguir lo que se creia hace seis años que seria facil ,llegar al poder en cantabria ahora el grupo de compañeros que le bailan a Lola no son mas que vividores que olvidaron el socialismo No buscan la mejora de la calidad de vida de los ciudadanos sino su calidad de vida Lo siento creo que usted se confunde y espero que lo haga de buena fe y no sea otro publicista mas de los que tienen en nómina.Gracias
Suscribo integramente el comentario anterior Este socialismo es lo mas parecido a un Club de amigos o a una sociedad gastronómica
Lolita no ha ganado na de na No tenia rival.Que se vayan
A mi estos me importan un pito Lo unico que quiero es que los regionalistas no pacte con esta gente
Por soñar no se paga jajajajajejejeje.Por favor de que partido habla De esa banda.Me gusta mas el art de arriba de Juana de Arco
Creo Sr periodista que usted no conoce la realidad de este partido o por lo menos no esta bien informado. Dolores gano el congreso regional con el 60% de los votos. Con todo el aparato a su favor y las " familias llamense guimerans, mañanes etc." que algun dia no muy lejano nos enteraremos del porque su apoyo ! esto de los molinos va a dar que hablar ! desmantelan la agrupacion de santander, la dividen en distritos " donde estan los locales para estos comites designados de distrito", y gana con el 58%. En todo lo que representa y maneja va perdiendo apoyos.Le recuerdo que este partido tubo hasta 16 diputados y dolores lo dejara en 7 segun todas las encuestas.Sabe quien debe de ser responsable de este desaguisado? pregunte a dolores , guerrero, guimerans y cia. pero tambien a los ciudadanos.Por cierto el periodico monopolio de esta region difinio esta noticia como " una barrida de dolores a rosa" que intereses tendra con tanto apoyo, quizas tambien algo de los molinos?,
muy bueno, y falta que hacia
Veo que aquí se es muy dado a cuando defiendes o no atacas postulados socialistas o del gobierno a emplear términos como "pesebreros" "estar en nómina",etc.... Los que así se manifiestas es que en alguna ocasión ellos mismos lo habrán experimentado y se dejan sedicir solamente por el poder. Creo - y ya jode tener que justificarse: no soy socialista, como tampoco lo es el que se autodenomina socialista en el comentario de abajo- que el articulista tiene razón; se dan aires nuevos, hay una esperanza en el socialismo cántabro. Convenía dejar ya de lado a Rosa Inés que representa una época y unas formas. Se hace necesario crear ilusión y equipos nuevos con planteamientos nuevos que pueden avivar una esperanza y elevar la boina del personal por encima de las cejas.
Rosa y Dolores para casa que no dais mas de sí.