Finalmente, Ponce se cayó de los carteles del Aniversario de La México

Después de haber recibido a nuestro requerimiento vía telefónica por parte de uno de sus apoderados, Juan Ruiz Palomares, la noticia de su segura participación en la corrida del día 4 de febrero en la que alternaría con Morante de la Puebla y otros dos toreros aztecas, y de que esta misma versión nos fuera ratificada ayer domingo 20 por el empresario de La México, Curro Leal, hoy lunes a medio día hemos conocido que el propio Ruiz Palomares llamó ayer por la noche a Rafael Herrerías para anunciarle que el valenciano había decidido en el último minuto no comparecer, lo que desde el punto de vista mexicano supone el incumplimiento de un compromiso previamente firmado que, tras arduas negociaciones, se logró tras ser aceptadas todas y cada una de las condiciones y caprichos que les fueron planteados por la administración del matador español.

Este indefendible incumplimiento deja descompuestas muchas cosas, desairada y en ridículo a mucha gente, incluyéndonos a nosotros que ya habíamos dado la noticia de su participación, y pone en bandeja toda clase de versiones que, sin duda, serán utilizadas en contra de Ponce tanto en en México como en España por los enemigos del gran torero para quien, desde este momento y de no haber pronto remedio al desafuero cometido, quedarían cerradas las puertas de la plaza donde fue el último de sus ídolos “consentidos” mientras continúen al frente de sus destinos sus actuales propitarios y gestores.

Así las cosas, la confección de los carteles del próximo Aniversario de la Monumental se ha complicado más de lo que estuvo desde el principio. Pues, Ponce que, desde hace tiempo, había apalabrado para este año dos comparecencias decidió hacerlo solo en una coincidente con el Aniversario tras sucesivas excusas por tener que cumplir varios compromisos sociales, y ahora que se habían aceptado sus muchas imposiciones, dinero, ganado y compañeros de cartel entre otras, ha causado no pocos problemas con su negativa. Y es que casi todo salvo la participación de José Tomás que aquí solamente exigió su dinero y un torero por delante, ha estado dependiendo de la última decisión del valenciano. En tan inquietante espera, también se cayó últimamente César Rincón a quien le estaban mareando y, antes de que se enredaran más las cosas después de varias imprecisiones de la oferta, El Juli no entró siquiera en discusiones ni en ninguna negociación aduciendo que este año no haría temporada en ninguna plaza de México.

Lo último que medio se sabe es que en el puesto de Ponce estará Sebastián Castella junto al ya fijo Morante mas dos espadas mexicanos, y que para completar el cartel del 5 con José Tomás se está negociando con otros toreros españoles como, por ejemplo, El Cid, para cubrir el lugar que, hasta ayer mismo, ocupaba el diestro francés.

Pero no todo son problemas en el México taurino de estos días. Esta misma tarde se ha sabido que, a partir de ahora, al menos en una corrida que se organice la próxima temporada podrán actuar diestros extranjeros sin la actualmente obligada participación paritaria de espadas nacionales. Mejor sería derogar del todo esta ridícula disposición legal que, como hemos dicho tantas veces, va en contra del propio interés del espectáculo en México, desde hace tiempo en franco declive y decadencia por la pertinaz falta de toreros locales realmente interesantes.