La política española va de prostíbulos. Carlos Magdalena

¡Quién lo iba a decir!, que tres insignes mandamases de la política socialista mantenían conversaciones de putas día sí día también como eje central de su trabajo y blanqueaban el puterio nacional. Al enterarse el presidente Sánchez a través de la UCO con cara compungida y en plan victimista dijo que eso se iba a acabar. Y como primera medida anunció a bombo y platillo que iba a eliminar la prostitución, es decir, el oficio más viejo del mundo. Y cuando estaba inmerso en esas medidas le disparan en la línea de flotación y le preguntan por los prostíbulos-saunas de su suegro. El estupor fue general y otros como el que esto escribe se partía de risa de algo que ya se sabía pero se callaba. A Feijóo se le han hinchado les collons y lo ha soltado. Bien por el presidente del PP hay que dejar de ser tan finos, tan maricomplejines y ponerse a la altura del contrincante, es decir por los suelos.
Y además le acusan y le piden datos de si con los  beneficios de esas saunas-prostíbulos él y su señora esposa habrían comprado en su día la vivienda donde residían  y que en la actualidad la tienen arrendada consiguiendo suculentas rentas al vivir en la Moncloa gratis. El zafarrancho de combate se montó y los ministros pesebreros, pelotas y demás beneficiados de la banda salieron al quite diciendo que se habían cruzado las rayas rojas "Habló de putas la tacones" 

        ¡Mira qué decir a la opinión pública en un Parlamento

          que el papá de la Bego tenía puticlubs!
 

Ya lo dice el dicho "no escupas para arriba que te cae para abajo". En España estamos cansados de tantos santurrones que van por la vida dándose baños de pureza, que dicen que no han echado un polvo fuera del matrimonio y luego se descubre que no solamente han echado un polvo sino que tenía una casa de putas a su disposición, y para colmo se lo pagaban todos los españoles.
Recordemos  la Biblia, en su pasaje "San Juan 8:7-8 RVC «Aquel de ustedes que esté sin pecado, que le arroje la primera piedra.» Y Jesús volvió a inclinarse, y siguió escribiendo en el suelo.

Nunca me cansaré de decir que tenemos unos políticos los peores de nuestra democracia y del mundo mundial, que no llegan ni a mediocres. Por eso insistimos en pedir pasar página y ver si el recambio hace lo mismo porque a nosotros nos tocará siempre pagar el solaceo de los políticos.

Qué lo pase bien en La Mareta Sr. Presidente en compañía de su ejemplar familia y compañeros de trayecto.

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