Noticias de Cantabria
08-08-2013 07:04

EL GOLPE DE TIMÓN

Ahora... que no antes, parece ser que tenemos que ser competitivos. Ahora, tenemos que ser más productivos. Ahora, debemos cobrar menos, por el mismo trabajo que antes. Ahora, se deben recortar las ayudas y subsidios de desempleo. Ahora, en el peor “ahora” posible, deciden acometer el déficit tarifario y subir los precios energéticos

 

Ahora... que no antes, parece ser que tenemos que ser competitivos. Ahora, tenemos que ser más productivos. Ahora, debemos cobrar menos, por el mismo trabajo que antes. Ahora, se deben recortar las ayudas y subsidios de desempleo. Ahora, en el peor “ahora” posible, deciden  acometer el déficit tarifario y subir los precios energéticos. Ahora, hay una parte empresarial, pidiendo mayor flexibilidad en la contratación de trabajadores, porque ahora, ya no se valora la lealtad, la fidelidad y la entrega del trabajador hacia la empresa. Valores por cierto, que hicieron de Japón una potencia mundial.

 

Es decir, ahora se pretende volver a los tiempos anteriores a Lincoln, que a pesar de su esfuerzo, ganó la guerra sin conseguir... el objetivo. Ahora..., ahora todo está peor que nunca. Y rehuyo entrar en comparaciones con otras crisis ya vividas, porque ni siquiera ahí, encontraremos soluciones o esperanzas.

 

Si alguien pensó en su momento que había que dar un “golpe de timón”, se equivocó en la dirección. Si alguien pensó en regular, equilibrar, recomponer este País, con ese “golpe de timón”..., se equivocó, porque..., que nadie se engañe, nada ha servido para mejorar la situación de la mayor parte del pueblo. Recalco, mayor parte del pueblo, que no diré que de nadie, porque sería incierto.

 

Y es que hablamos de “la situación”, pero lo hacemos de una manera tan amplia que desenfocamos el objetivo. ¿“La situación” de qué o de quien?.  Solamente lanzaré una pregunta al común de los paisanos y presumo de conocer la respuesta.... ¿Ahora..., mejor que antes o peor?. Ahora.... (ponga Ud. mismo su respuesta).

 

Pero no para todos, porque hace unos días se publicaban los primeros avances sobre resultados de grandes empresas. Por decencia, no las cito, pero si diré que sus cifras de beneficios eran abrumadoras comparativamente con las que maneja, ahora, el común de los paisanos.

 

Algunas de ellas (sigo sin citarlas pero se entenderá) tienen una relación directa con la situación que padecen muchas otras, más pequeñas y humildes pero que tienen su cometido y dan trabajo a miles de españoles, es decir, la falta de financiación. Y a estas últimas, ni tampoco al común de los mortales, les llegó el amparo gubernamental que desde Bruselas nos impusieron en forma de millones de euros, que hay que pagar entre todos.

 

Ahora..., las que más perdían, más ganan y las que aguantaban el duro envite, se hunden y con ellas, miles de empleos y de sueños. En la misma línea de conclusiones, podríamos decir que, si aquellas suben es a costa de los “otros” y en los “otros” meto a esas pequeñas empresas o negocios, pero también, a la inmensa mayoría de los ciudadanos de este País.

Ahora..., parece que estemos abocados a vivir una nueva “situación” que no alcanzo a entender por qué algunos comunes aplauden. Sobre todo porque los preludios de esa nueva “situación”, no son nada halagüeños, más bien al contrario. Y es que..., si todo lo que piden se cumple, si todo lo que plantean sale adelante, si el ciudadano de a pie no va a mejorar su “situación” es decir, su vida, podemos concluir finalmente que Lincoln, no solo no consiguió el objetivo, sino que... realmente perdió la guerra.

 

Rafael Fernando Pérez Tezanos- Diputado del PRC.

 

 

 

¿Quieres envíar un comentario?

Comentarios(1):

El despistado que pasaba por ahí. - 08-08-2013

Un buen análisis que da lugar a un buen artículo. A mi entender, certero; pero lo más importante, un artículo de opinión al que nosenos tiene acostumbrados. No sale a relucir Grutel, Bárcenas, eres andaluces, Caso Campeón, ni un sólo TU MÁS. Se agradece. Y,en todo caso, se manifiestalo obvio, el cambio de timón ha sido ineficaz. El mosntruo queda insatisfecho, quiere más y más, de parte de la mayoría de los ciudadadnos. Ahora bajar salario para facilitar la creación de empleo. Crasso error, la embarcación entra en corriente de catarata. El fatídico desenlace, de no hacer un gran viraje, está próximo. Y, en el mejor de los casos, el monstruo neoliberal ha ganado la partida y como dice el autor, retrocedemos a tiempos anteriores a Abraham Lincoln, es decir,la esclavitud, el hombre sin recursos y sin derechos, pero con el látigo enfurecido sobre sus espaldas.