28-07-2009 09:00
España se quema
Nuestra tierra nunca debió ser un vergel, aunque quizás algún lejano día fue un inmenso robledal que podía ser atravesada de árbol en árbol, sin pisar tierra, por la mítica ardilla de Plinio.
Pero lo más probable es que el clima árido y cálido, y los propios campesinos con sus cultivos de rozas consiguiesen abrasar gran parte del territorio. Conforme la agricultura avanza, el paisaje se transforma. No son nuevos los incendios provocados para limpiar un campo, ni las tormentas cuyos rayos incendian los restos de hojarasca abandonada.
El lugareño ha luchado tradicionalmente contra los incendios que amenazaban sus cosechas y sus bienes próximos. Pero ya quedan pocos jóvenes en los pueblos, habitados por pensionistas o por gentes de ciudad que pasan unos días de descanso en las viejas casas. Y los montes quedan abandonados, sin limpiar los rastrojos, las ramas caídas, el matorral que avanza, el árbol dañado… Hoy multitud de urbanizaciones deben ser precipitadamente abandonadas mientras avanzan los frentes de fuego. Y sin embargo asistimos impotentes a su desoladora destrucción, mientras las únicas medidas que se aplauden son la llegada de subvenciones, la detención de un pirómano, o la formación de comisiones para poder culpar a alguien de cocinar una paella.
Y otro año más, arden Cuenca, se incendian los montes de las Urdes, se abrasa Teruel, se arrasan los pinares de Tarragona, se calcina Castellón, se destruyen urbanizaciones, campings y fincas,... Y nos siguen contando la milonga de que hay malhechores que queman los bosques.. Pero el problema principal es el abandono constante de nuestros montes. Esta primavera, como tanta otras, con las lluvias, ya se advirtió por muchos que los incendios podrían ser muy violentos. Y ya los tenemos aquí. Mientras el anticiclón de las Azores mantiene sus altas presiones sobre la península, España arde.
El incendio del campo, el monte que se abrasa es la vieja pesadilla de todos los veranos. Humo en nuestros montes, llamas que avanzan, riqueza destruida, quejas, llantos, varios muertos que llorar... y la promesa de arreglar los problemas a base de leyes.
Así hasta que el próximo año, otros fuegos calcinen nuevos bosques y, como siempre, volvamos a lamentarnos.
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Comentarios(7):
Efectivamente. Nadie ha quemado nunca bosques para conseguir pastos o terreno urbanizable, ¿verdad señor Domenech?
Después de leer este artículo se comprende mejor que nunca porqué el Sr. Domenech es uno de los más reputados intelectuales.
Seria buena una buena Republica,fuera la democracia y la monarquia,En el valle CAMALEÑO somos REPUBLICANOS
Efectivamente España se quema, Dolores de Cospedal echará la culpa al presidente Zapatero, el presidente Zapatero a los pirómanos, los pirómanos a las tormentas secas, y la guardia civil y bomberos arriesgan su vida, detienen a algún culpable y pasa cuarenta y cinco minutos en la carcel, pero que coño está pasando en este país. Me lo expliquen.
Vamos a ver si me explico. Efectivamente hay fulanos que provocan incendios por afán de lucro, pero , a tenor de los últimos informes policiales, son la minoría. Hoy hay autonomais donde un lugar quemado, es ya de por sí, inrecalificable desde el punto de vista urbanistico. Los detenidos son de otro tipo: Hay tarados que queman por el placer de incendiar: el pirómano psicópata, que suele ser siempre detenido. Y luego hay un gran grupo, de excusionistas atolondrados o fumadores arrojando pitillos desde el coche, que provocan incendios. Pero los bosques se queman , fundamentalmente, por el abandono atroz en que se encuentran años y años, sin lugareños que los limpien --ya apenas quedan campesinos -- y sin que las autoridades tomen medidas. ¿Cómo se explica que ardan altas sierras de Teruel, de Béjar, de Almería, de Avila, o media provincia de Guadalajara hace unos años, sin ningún intereés urbanistico ni maderero? Sencillametne por abandono. La sequía y el calor hacen el resto. De todas formas, a todos, muchas gracias por sus comentarios.
51 detenidos por la Guardia Civil ¿y no hay pirómanos, señor Domenéch?
Pero que dice este hombre, la mayor parte de los incendios son provocados para obtener beneficios o por enfermedad del autor, no por abandono de los montes. Si abandonásemos los montes no se quemarían se queman porque gentuza, que sabe que no le pasará nada si les detienen, los pega fuego.