
TATUAJES. Miguel Lopez Sintes
Hace unos días vi a una chica, jovencita pero no en exceso, colmada de tatuajes por todas las parte visibles, y lo que me hace suponer que igualmente estaba en todas aquellas partes no visibles. La primera sensación es de molestia pensando en el numero de pinchazos que se han de soportar en muchas partes del cuerpo especialmente sensibles, para recoger toda una amalgama de dibujos, signos, lemas y un largo etc.