El consejero RUIZ y el RACING S.A.D

 El diario de papel, que le va la vida en el envite, al día siguiente hacía, sobre las cortas y claras declaraciones del consejero, interpretaciones de tipo lobbysta que no había dicho el consejero. Lo que ocurre es que esas interpretaciones se desvirtúan por sí mismas porque ahora existe el medio digital, la pluralidad informativa que llega sin coste alguno y los ciudadanos pueden informarse con veracidad. No existe la opinión dirigista de antaño, Cantabria está abierta al mundo gracias al digitalismo informativo y las declaraciones ya sean de Ruiz o de cualquier otro consejero no pueden ser interpretadas al gusto del periódico de marras.

El tema de la subvención al Racing es muy peliagudo porque existen razones muy fuertes para no meter dinero público en una empresa privada por más que se apele al presunto sentimiento de la marca o  que se va a proyectar la imagen de la Comunidad etc. Los campos de fútbol en los que juega el Racing son de tercera división  y tampoco  son los mas idóneos para proyectar la imagen de Cantabria, si fueran de primera división, podría ser, pero tampoco, se trata de dinero de los contribuyentes y con ese dinero no se juega.


En Cantabria existen muchos deportes de practicar, desde el golf, la vela, piragüismo, bolos, etc. y a todos hay que atender y potenciar ya que la cultura también llega por el deporte de practicar y nunca por el de vociferar. Hay que ir a los hechos y no hacer ver ante la opinión pública cosas que no son ciertas.

La ciudadanía esta dividida en dar esa subvención y creemos que es mayoría la que dice, No. Y los políticos tienen que ser cautos en si procede o no procede dar una subvención a una empresa privada de esas características, atendiendo a la situación de crisis, paro, emigración de nuestros jóvenes cualificados al extranjero etc. No sería moral aunque fuese legal. Cantabria no está para tirar cohetes y el dinero de todos no es chicle... Revilla anunció que se trataría en el Parlamento y ese es el sitio en donde se tienen que retratar o mojarse los grupos políticos. Ésa es la única contestación que se puede dar hasta ahora y no interpretaciones sesgadas para atender el interés de un lobby de parte.