Italia no quiere problemas de inmigración y dice "se acabo la fiesta para los inmigrantes ilegales"

  "Enviaremos a nuestra delegación para decir `no` al documento que se discute, que en lugar de ayudar penalizará aún más a Italia y a los países del Mediterráneo, favoreciendo los intereses de los países del norte de Europa", ha dicho, según ha informado el diario local `La Repubblica`.

   Asimismo, ha pedido "sentido común" y ha recalcado que "la recepción de cientos de miles de `no refugiados` no puede continuar siendo únicamente problema de Italia".

   "O Europa nos echa una mano para garantizar la seguridad de nuestro país, o tendremos que elegir otras vías", ha agregado Salvini, en un breve mensaje publicado en su cuenta en la red social Twitter.

   Así, ha manifestado durante una visita a la ciudad portuaria de Pozzallo, donde se lleva a cabo el registro de los migrantes llegadas a las costas de Sicilia, que "se acabó la fiesta" para los migrantes, tal y como ha recogido la agencia británica de noticias Reuters.

   Salvini defendió el domingo la política de expulsión de inmigrantes recogida en el programa de gobierno y argumentó que con la misma "se salvan vidas" al prevenir naufragios.

   "Con los inmigrantes no tenemos una línea dura, sino de sentido común. Las expulsiones salvan vidas", dijo durante un acto de campaña para las elecciones municipales celebrado en Catania y recogido por el diario `Corriere della Sera`.

   "Basta de una Sicilia convertida en el campo de refugiados de Europa. No nos quedaremos sin hacer nada mientras siguen los desembarcos y desembarcos y desembarcos. Necesitamos centros para expulsiones", puntualizó.

   En ese sentido, defendió los acuerdos con los países de origen porque, ha reconocido, no se puede enviar a nadie a un país que no esté dispuesto a aceptar a esa persona. También aspira a "evitar las partidas" y prevenir así los naufragios que han convertido "el Mediterráneo en un cementerio".

   "La vida es sagrada y para salvarla debemos evitar que las personas salgan en armatostes al mar. Haré todo lo posible por trabajar con esos gobiernos para evitar la partida de los desesperados que creen que hay oro en Italia cuando no hay ni trabajo para los italianos", indicó.

   Salvini arremetió contra la UE por la llegada de inmigrantes "nocivos a Italia". "España y Francia nos dejan la carga a Italia", afirmó, al tiempo que recordó el alto coste de proporcionar asistencia a los solicitantes de asilo y los trámites burocráticos que conlleva.