Agudo quiere volver a imponer el impuesto de sucesiones en perjuicio de la clase media

   El consejero de Economía y Hacienda, Ángel Agudo, ha respondido "de forma clara y contundente" a las declaraciones de la Asociación de Asesores Fiscales, que ha criticado la reforma del impuesto de Sucesiones propuesta por el Ejecutivo cántabro, y ha recordado que el Gobierno "tiene la obligación de gobernar y de tomar decisiones para todos los cántabros, no para una parte de la población, como son los grandes clientes de los asesores fiscales". 

   En un comunicado, el consejero rechazó "el alarmismo artificial", que en su opinión trata de generar esta asociación, y negó la "supuesta fuga de patrimonios" por la reforma de la imposición en Sucesiones.

   "Queremos dejar claro, desde el Gobierno, que la reforma no va a propiciar ninguna fuga de patrimonio fuera de Cantabria como tampoco hubo ninguna llegada de patrimonio cuando en 2002 se modificó el impuesto de Sucesiones, que fue un argumento que entonces se utilizó y que en la práctica  no se ha producido", dijo.

   Agudo precisó que para que esa "fuga" se pudiera dar, sería necesario que las personas con altos niveles de riqueza "planificaran su muerte con cinco años de antelación", que es el tiempo mínimo necesario para que una persona fije su residencia habitual en un territorio.

   "Tendría que ser una persona que planificara su muerte con cinco años de antelación y se fuera a residir a aquella autonomía con imposición más beneficiosa, porque no vale con cambiar el domicilio fiscal, es necesario que tenga allí su residencia habitual", dijo.

   Además, matizó "algo que no se comenta en la nota de los asesores fiscales", y es que se mantienen las deducciones que hay actualmente en la base imponible del Impuesto de Sucesiones por herencia de vivienda habitual del fallecido o del negocio familiar, y que  alcanzan, en algunos casos, el 99%.

   "En realidad, estamos hablando de que la reforma que hemos planteado supondrá que tengan que pagar más que la actualidad el 17% de los declarantes por este impuesto, es decir, con datos de 2008, unas 367 personas", señaló el consejero, quien insistió en que "el 83% de las declaraciones por Sucesiones se beneficiarían  de las deducciones".

   "En un contexto de crisis, y de crisis desigual, se puede pedir a estas personas un esfuerzo para que, a la vez, podamos poner en marcha bonificaciones y desarrollar, así, una política fiscal solidaria", apostilló.

BONIFICACIONES

   El consejero explicó que en la reforma fiscal el Gobierno también ha creado un tipo reducido del 5% en el Impuesto de Transmisiones y Actos Jurídicos Documentados del que se beneficiarán los entornos familiares de personas con discapacidad, lo que afectará de manera positiva a 20.000 hogares de Cantabria (100.000 personas).

   Además, aseguró que el Gobierno quiere aplicar este tipo reducido también en el caso de compra de vivienda habitual en zonas rurales con riesgos de despoblación.

   Por otra parte, afirmó que el Ejecutivo ha puesto en marcha bonificaciones en el Impuesto de Donaciones para el acceso a la vivienda de jóvenes a los que sus padres quieran donarles dinero para la compra de su vivienda habitual, para la compra de un terreno sobre el que construir su vivienda habitual o para la adquisición de un pequeño negocio en el que el descendiente pueda realizar su actividad profesional o económica, "estimulando el espíritu emprendedor".