Los porcentajes de los políticos y las verdades de los ciudadanos

Después, nos hemos hartado de divagar sobre si Cantabria tenía que optar entre la industrialización y el turismo, cuando nos hemos cansado de reiterar y repetir que no se trata de optar ya que lo que venía a Cantabria eran los restos que no querían las ahora comunidades pudientes, como la vasca y la catalana.

Mientras vamos recuperando una autonomía, los ciudadanos vetamos a nuestros representantes las demagogias y las cifras, y exigimos rigor y técnica. Estamos cansados de charlotadas en las que determinados consejeros hacen unas risas de cifras y de propuestas quiméricas que no conducen a ninguna parte. Esta introducción sirva para referirnos a la intervención que tuvo hace días nuestro consejero multifuncional de Economía y Hacienda, economista y profesor, Ángel Agudo. Éste, para empezar, nos emborrachó a cifras. Seguro que consiguió lo que se proponía, que no nos enteráramos de casi nada, salvo de que Cantabria es el país de las maravillas.

Cantabria necesita trabajo y empresas y facilitar que éstas se instalen, lo que no necesita es incrementar el número de funcionarios, que a veces ni lo son y acuden de otras comunidades a la llamada del amigo. El consejero de Economía ha cubierto cinco nuevas plazas de subdirectores y ha traído un no funcionario de La Moncloa a su Consejería. Solo un inciso, la Consejería de Economía es la única que incumple la ley de igualdad, pues no hay dicha igualdad dentro del equipo.

Agudo nos informa un día sí y otro también que Cantabria sigue creciendo. Ahora dice un 3,9%, hace mes dijo un 4,1%, y así vamos, como la lancha de Treto. Este profesor de la escuela Keynesiana nos vuelve locos, nos atiborra de cifras, de departamentos y de institutos. Debe de conocerse muy bien la ley del funcionariado, nombra uno y se crean cinco.

Lo mejor viene después, en su última rueda de prensa, más o menos nos dice que la construcción no tiene importancia para Cantabria y que éste sector ha sido sustituido por la industria. Nuestra pregunta es: ¿Dónde está la industria, donde está esa sustitución? Además, estamos a la espera de ver esos 20.000 puesto de trabajo que dice que va a crear.

¿Empresas? Existen algunas emblemáticas en Cantabria, el único ‘pero’ es que son las más contaminantes, Sniace es la más llamativa. Otras, no pasarían mínimamente una inspección medioambiental. Para cerrar empresas no hace falta ir muy lejos, no hay más que mirar el último caso, Candemat. Empezó con al crisis el PP y ahora el PSOE, con sus consejero de industria al frente hacen de enterrador.

Para hablar habría que leer mucho y bien los informes del BS y la revista ‘Cantabria Económica’. Ahora dice lo siguiente: El Gobierno de Cantabria cree que la industria es el "elemento diferenciador" que explica por qué la región creció el pasado año por encima de la media española y cerró el ejercicio con un aumento del 3,9 por ciento del Producto Interior Bruto (PIB). Y es que, a su juicio, se está consolidando un cambio del patrón de crecimiento que, si bien será menor en el futuro y se moverá en 2008 entre el 2,4 y el 2,7 por ciento, será un crecimiento "más sólido, seguro y sostenible". Naturalmente que los informes vienen del CES, pero quien los hacen son los estudiantes y profesores de la UC.

Repetimos, el crecimiento de nuestra comunidad, se dijo que rondaría al 4,1% y estamos en el 3,9%. Esperemos y veremos. El consejero Agudo sigue con sus porcentajes, qué pena que no lo traduzca a miles, lo entenderíamos mejor. Dice que la industria cántabra creció el pasado año un 4,7%, mientras que la media fue un 2,7%. Lo que les digo, este consejero actúa de profesor, solamente que no está en clase.

Sigamos con los números de Agudo, y dice: La construcción creció un 3,8%, los servicios un 4% y en el sector primario el PIB se redujo un 0,2%. El empleo, por su parte, creció a un ritmo del 3,8% (medio punto más que la media) y el PIB per cápita alcanzó el 99,91% de la media española. Según Agudo, a los cántabros les faltan "veinte euros por cabeza" para igualarse al PIB per cápita español, algo que, a su juicio, se conseguirá o incluso superará en "pocas semanas o meses".

Pero continuamos, no se pierdan lo que corrobora el consejero de Industria, que dice, Del Olmo: La interpretación que hace de estos datos el consejero de Industria coincide plenamente con la de Agudo. Para Del Olmo, se constata la "magnífica situación sanitaria de la industria de Cantabria", que se acompaña además de un "crecimiento espectacular" de la inversión en bienes de equipo (+8%), lo cual permite "afrontar con cierta dosis de optimismo la evolución" del sector en la región a lo largo de 2008.

Como se darán cuenta, esa fraseología y esa porcentaje conceptual de nuestros consejeros no admite un debate serio, a menos que la conclusión sea la que nos imaginamos y decíamos al principio de nuestro escrito, que para nuestro Agudo estamos en el país de las maravillas.

Y no se lo pierdan, dicen a continuación: la economía cántabra va "por buen camino" porque el sector industrial permite a la región mantenerse "en la senda de la competitividad" en un momento en el que otros sectores, como el inmobiliario, experimentan una "ralentización". No es eso lo que dice la Asociación de Promotores y Constructores de Cantabria con las 13 medidas que propone. No se deben de edulcorar las realidades aunque sean negativas, sino decirlas, estudiarlas y resolverlas. Según dijo, todo esto demuestra "la pujanza de una sociedad" y porque "el Gobierno de Cantabria no es, ni de lejos, el único responsable" de la buena situación económica. "Pero algo habrá tenido que ver la política industrial de los últimos años", apostilló.

Bien, hasta aquí las críticas, que deseamos sean constructivas, porque lo único que pedimos es que cuando hablen no lean informes parciales que les dan sus asesores, sino que traten de explicar a los ciudadanos realidades que podamos entender. Deberían de aprender de nuestro presidente Revilla, por algunos tan denostado y criticado y por otros, soportado, desde que estuvo con el PP y ahora con el POSE, solo dice realidades y expone necesidades de perogrullo y, curiosamente, se le entiende muy bien, incluso fuera de Cantabria.

Seamos o no regionalistas, es obvio donde queremos ir y estar, en una sociedad de desarrollo y de bienestar y para llegar ahí y disfrutar de los beneficios que esa situación social genera se precisan buenas comunicaciones como lleva el presidente Revilla repitiendo 8 años al PP y al PSOE. Necesitamos mejorar en carreteras, ampliar la de Torrelavega, la de Bilbao, un tren de alta velocidad a Madrid y no un mixto, un tren de alta velocidad a Bilbao y no un mercancías.

Señores consejeros, las comunicaciones siempre han sido las artífices de que las regiones, ciudades y países prosperen. La comunicación es fundamental y esa es nuestra asignatura pendiente y en la que hay que incidir, para poder traer y llevar mercancías, el tener un aeropuerto internacional para sacarle rendimiento. Además, el puerto de Cantabria debe de potenciarse y no debe ser el puerto ni de un partido ni de una persona.

Terminamos diciendo que no queremos cifras, cifras y cifras, deseamos obras, obras y obras y sobre todo, que no nos hablen con porcentajes sino con realidades. A todas las tertulias de los porcentajes las llamo las mentiras del ignorante. Nadie pregunta por no quedar de panoli.