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Cantabria 21-06-2025 11:15

La jueza absuelve al ganadero de La Cavada acusado de desatender a dos mastines y declara prescrito el delito

La protectora Ayrecan se hizo cargo de los perros, uno de los cuales murió, y recurrirá la sentencia ante la Audiencia de Cantabria

La titular del Juzgado de lo Penal número 4 de Santander ha absuelto al ganadero de La Cavada, en el municipio de Riotuerto, acusado de desatender a dos mastines que estaban en su finca, uno de los cuales murió.

En la sentencia, la jueza le absuelve de un delito contra los animales, que declara prescrito además. El fallo, al que ha tenido acceso Europa Press, no es firme, ya que cabe apelar a la Audiencia Provincial de Cantabria.

Un recurso que la protectora Acción y Reacción Animal Cantabria, que se hizo cargo de los perros y que ejerce la acusación particular, va a interponer, según han trasladado fuentes de Ayrecan a esta agencia.

Antes y después de la vista oral, el fiscal pedía 18 meses de prisión y 3.300 euros de multa al procesado, como autor de sendos delitos de maltrato animal y que negó que los canes fueran suyos.

Alegó en el plenario que los perros aparecieron por las inmediaciones de su finca, a la que entraban y salían, así como también a propiedades y prados de vecinos, ya que llevaban tiempo "pululando" por el pueblo.

Su abogado insistió en la libre absolución de su cliente en tanto que la protectora se ratificó en la petición de dos años y medio de prisión y elevó a 13.666 euros la reclamación por los gastos veterinarios y de manutención de los mastines.

Los hechos enjuiciados ocurrieron en septiembre de 2021, cuando voluntarios de Ayrecan recogieron un mastín -hembra de aproximadamente un año- en "muy mal estado" de salud, con heridas infectadas por todo el cuerpo y deshidratación. Fue tratada en una clínica, donde murió días después.

Y días después, agentes del Seprona (Servicio de Protección de la Naturaleza) de la Guardia Civil acudieron a la finca del ganadero enjuiciado, donde había dos perros, uno mestizo y otro mastín, hermano de la anterior, que fue recogido por los efectivos.

"SIN IMPEDIMENTO ALGUNO Y DE MANERA INJUSTIFICADA"

La jueza considera probado que el ganadero, "sin impedimento alguno y de manera injustificada, dejó de atender así como de proporcionar cuidados, comida y agua" a la perra, que tenía en su estabulación ganadera y hasta que fue recogida y llevada al veterinario, donde falleció.

También entiende acreditado la magistrada que, con posterioridad a este hecho, los agentes localizaron en la explotación del acusado otro mastín, que fue igualmente rescatado y que también presentaba heridas y deshidratación, por lo que precisó tratamiento.

La sentencia constata que los gastos generados por la asistencia veterinaria prestada a los dos perros han sido sufragados por la protectora, que la estabulación ganadera donde fueron encontrados es propiedad del acusado y que la causa ha estado paralizada, sin que se llevara "actuación sustancial alguna", entre el 13 de octubre de 2022 y el 27 de agosto de 2024, es decir, casi dos años.

ABANDONO Y DESATENCIÓN, PERO NO MALTRATO INJUSTIFICADO

A la hora de dictar el fallo, la jueza aplica la legislación vigente en la fecha de los hechos enjuiciados, por ser la más favorable al acusado, del que pone de manifiesto la "grave dejadez en el cuidado de los animales" hasta el punto de que uno murió.

Esto, aunque "vulnera cualquier obligación legal y moral de protección a los animales domésticos y los deja en unas condiciones que ponen en peligro su vida" y "su integridad", no supone -razona la magistrada- "el maltrato injustificado o causación intencionada de lesiones" como prevé el actual articulado del Código Penal, "sino el abandono, la desatención absoluta del animal".

Añade en la sentencia que el ganadero "se convirtió en garante de los animales desde el momento en el que", como él reconoció en el juicio, "permanecían en su estabulación, aunque no fuera diariamente", sino algo "esporádico o circunstancial".

"A nadie se le escapaba, dadas las condiciones en las que fueron rescatados los animales, la necesidad de ser atendidos médicamente y nutrirles", esgrime la resolución en la que, no obstante, se concluye que es un delito leve y se declara prescrito además.

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