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Opinión 30-06-2025 06:17

POR QUÉ: ¡HORROR, QUE VIENE LA DERECHA! Por Juan Goti Ordeñana Catedrático jubilado de la Universidad de Valladolid

Algunos afirman desde el partido socialista, que son partidarios de la democracia. Pero visitemos un poco la historia, para observar que su doctrina esta muy alejada de este tipo de organización de la sociedad. Pues desde sus inicios ya tienen como lema que para salvar la democracia lo más seguro es frenarla. Ese es el programa decisivo para lo que instituyen, con frecuencia, echar mano del cordón sanitario.

 

 

Algunos afirman desde el partido socialista, que son partidarios de la democracia. Pero visitemos un poco la historia, para observar que su doctrina esta muy alejada de este tipo de organización de la sociedad. Pues desde sus inicios ya tienen como lema que para salvar la democracia lo más seguro es frenarla. Ese es el programa decisivo para lo que instituyen, con frecuencia, echar mano del cordón sanitario.

Y no se trata de una novedad, ya que consta en el ideario del PSOE, marcado en el programa de su fundador, desde que Pablo Iglesias Pose en el Congreso de los Diputados el 5 de mayo de 1910 proclamó que: «Este partido (PSOE) estará en la legalidad mientras la legalidad le permita adquirir lo que necesita y fuera de la legalidad cuando ella no le permita realizar sus aspiraciones». De modo que se trata de la democracia que ella construya, y con negación, por principio, de la que elabore la derecha, cualquier derecha que se trate, ya que no puede ser demócrata, porque ellos lo dicen. Por lo que cuando Sánchez declara solemnemente que no va a dimitir porque no puede dejar gobernar a la derecha, está cumpliendo con el programa que ya le dejó claro el fundador del partido.

Según esta izquierda se llega a aceptar que, para guardar un paripé, pueda votar la ciudadanía, y hasta llegar a aceptar que gobierne quien consiga una mayoría de votos, pero esto vale sólo si va a seguir las líneas marcadas por la izquierda. Y aunque la actuación de la izquierda sea inmoral o criminal, hay que liberar la democracia de las sucias manos de los ciudadanos, no vayamos a caer en una derecha ultra, porque por delante se nos ha dicho que se trata de una «ultradereha fascista y nazi corrupta», aunque, según la historia, el fascismo y el nazismo nacieron de la izquierda.

El objetivo del gobierno del PSOE, que sufrimos, es: proteger a los que succionan al pueblo español hasta su agotamiento, favorecer el enorme negocio de expolio de sus dirigentes, aunque sea empobreciendo al pueblo español, pagar a prostitutas y darles puestos de trabajo oficial, subvencionar a los que destruyen la familia, contratar obras poniendo la mano y embolsando como con Filesa, Malesa y Time-Export, con aquella apropiación indebida de Andalucía y otros muchos casos que son largos para citar, y, para concluir, aun el reparto de España en trozos para unas nuevas Taifas, sin dejar de facilitar salidas para cuando se cese en el poder creando consultorías para Pepiño, Zapatero y Bono.

Siguiendo el examen, qué esperanza dan al Estado, quienes pretenden vender a España a sus enemigos separatistas, y quienes siguen disfrutando del poder sin plantear una mejora de la sociedad, pero sí, por el contrario, han consentido mordidas en el Ministerio de Hacienda, sin que se haya advertido ninguna irregularidad hasta que han sido descubiertos por la policía. Donde quien quiera puede conseguir un favor, un contrato, la eliminación de un expediente, si colabora con una mordida, o se puede crear una acusación si eres del partido contrario, y publicarlo con grandes alaracas por el Fiscal General, al objeto de ocultar las propias vergüenzas. Conviene, también, saber que están en venta las influencias de los altos cargos de la Administración.

Se ha abierto la veda al tráfico de influencias, que constituye la verdadera industria de los políticos en estos momentos, con objeto de promocionar la libertad y el feminismo, pagando la ciudadanía los gastos para el enriquecimiento de unos políticos avispados. Los hechos están ahí, la UCO los ha puesto en evidencia: unos sujetos que promocionaron al actual presidente, han sabido aprovechar este favoritismo de su acción para hacerse con el control del partido, lo que les ha dado el poder de todo el aparato estatal, y disponer del presupuesto público y de la Hacienda para crearse una democracia a la medida de sus caprichos.

Ante este concepto de la democracia de la izquierda, y llevado a cabo de este modo, necesariamente tienden a propugnar que no llegue la derecha y más la «ultraderecha» al poder, porque los pondría en evidencia y conseguiría reconstruir la sociedad, como está sucediendo con la derecha en Argentina, después de tantos años de destrucción de la izquierda. Se propone la izquierda, con toda fuerza, cortar esta reacción que supondría la llegada de la derecha, para ello se crean imágenes publicitarias de lo terrible que sería un gobierno de derechas. Pero sin esperar a los resultados que supondría este cambio, en Europa ya se anulan las elecciones en que gana un partido de derechas, o se le busca cualquier acusación amenazando con la cárcel, o cualquier otro subterfugio para evitar que llegue al poder quien pudiera canalizar este cambio.

En España estamos siendo críticos con el gobierno que tenemos, pero no podemos decir que sea porque actúa con desviación de su línea de izquierdas, pues si definió su fundador Manuel Iglesia Pose, que su partido actuaría conforme a la ley si le era favorable, y ?fuera de la legalidad cuando ella no le permita realizar sus aspiraciones?, no sé por qué podemos acusar a Pedro Sánchez, si actúa según los sueños que tiene de lo que es su Estado, está dentro de sus aspiraciones, por muy disparatadas que sean. Ese fue el lema que le propuso su fundador, y quien procede siguiendo los objetivos de la institución actúa según el ideal que se ha propuesto el partido.

El problema fundamental es que la sociedad no sepa qué programa y qué finalidad tiene el partido socialista. Lo terrible es a dónde lleva un partido que desde su origen tiene por objeto destruir a la sociedad porque la quiere hacer a capricho de una ideología, y no considerando lo que es la naturaleza humana, puesto que no mira al bien de la sociedad, sino al provecho de un grupillo de aprovechados. De aquí que la culpa de este desajuste que tenemos en la política española viene, de que la sociedad no ha sabido ver cuál es la naturaleza del PSOE y los partidos de izquierdas.

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