Los abogados reconocen a Ángel de la Fuente y Luis Revenga por sus 50 años en el Colegio
El Colegio de la Abogacía de Cantabria ha celebrado este viernes la festividad de su patrón, San Juan, cita en la que ha reconocido a Ángel Fuente y Luis Revenga como colegiados de honor al cumplirse 50 años de su incorporación a la entidad. Según su decano, Carlos Pérez, ambos constituyen un "ejemplo de vocación duradera y compromiso profesional".

El acto central de la tradicional fiesta de los letrados de la región ha tenido lugar en el Paraninfo de la Universidad de Cantabria (UC).
Tras la jura o promesa de los 25 profesionales que se han incorporado recientemente al Colegio y el homenaje a Fuente y Revenga, se han entregado diplomas conmemorativos por su medio siglo como colegiados a Armando Junco Fernández, Miguel Millán Pila, José María de Noreña y Jesús María Souto Aller, y también a los abogados que han cumplido 25 años de ejercicio.
Al acto han asistido el presidente del Tribunal Superior de Justicia de Cantabria (TSJC), José Luis López del Moral; el fiscal superior de Cantabria, Jesús Arteaga; la consejera de Justicia, Isabel Urrutia; la decana del Colegio de los Procuradores cántabros, Rosaura Díez; representantes del Consejo General del Poder Judicial y del Consejo General de la Abogacía Española, así como los integrantes de la Junta de Gobierno del Colegio de la Abogacía, encabezados por su decano, Carlos Pérez Sánchez.
A su juicio, esta celebración "encierra el alma misma del Colegio: el encuentro entre generaciones, el compromiso con la Justicia y el reconocimiento a la trayectoria profesional".
Y aprovechó su intervención para lanzar un mensaje de "unidad y futuro" y repasar también los principales retos y objetivos de la Junta de Gobierno: "Fortalecer la comunicación, mejorar los servicios y reivindicar el papel esencial de la Abogacía en nuestra sociedad".
Al hilo, Pérez Sánchez reiteró las mejoras reclamadas para el turno de oficio, servicio que prestan unos 550 abogados en Cantabria, y para una jubilación "digna" para los miembros de la Abogacía y la Procura y que la prestación que reciban no sea una "precariedad".
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