¡No llores por mí, Venezuela!

¡Entre todos la tenían y ella sola se fue al precipicio de la Historia!

¿Exagero?...

Venezuela es el país con mayores recursos naturales de Hispanoamérica, con casi un millón de Km2 y más de 30 millones de habitantes; al mismo han emigrado muchos españoles para hacer fortuna; algunos exiliados, como el famoso piloto torrelaveguense, Eloy Fernández Navamuel, triunfaron en ese país americano donde llegó a ser nombrado Director de la Vivienda Rural, con jurisdicción en cinco provincias y con capitalidad en Maracay, recibiendo el Premio Nacional de Arquitectura por la construcción de la iglesia de Tanaguarena; también participó en la rehabilitación de la ciudad colonial de Coro, declarada por la UNESCO, Patrimonio Cultural de la Humanidad. Y va a ser la foto de este personaje triunfador, con su esposa, en Barquisimeto (Venezuela), la que ponga en este artículo; comprenderán que no ponga a Pablo Iglesias, Chávez, Maduro ni a Zapatero.

¿Y qué queda de todo este esplendor, después del paso de los “bolivarianos”?. Pues, por ejemplo, que el país con la mayor reserva petrolera del mundo, tiene que racionar la gasolina; que la inflación está en tres ceros, por lo que la moneda no vale nada (por 4.000 pesos no te dan ni un euro); que las pensiones casi no existen y la de quienes han emigrado han desaparecido; que los supermercados y tiendas de alimentos, están vacíos; que miles de niños se mueren de hambre o de desatención médica; que el sistema sanitario y escolar está colapsado; que los abusos policiales son habituales y brutales; que los medios de comunicación críticos con el régimen han sido clausurados o incautados; que las empresas extranjeras son acosadas sistemáticamente por el régimen;  que miles de venezolanos huyen del país para buscar mejores perspectivas en Colombia, Brasil o donde sea… (Solo por la frontera de Cúcuta con Colombia pasan al día miles de venezolanos a buscar comida o a huir del país).

¿Saben cuál es el lema de Maduro para las próximas elecciones dónde no deja presentarse libremente a la oposición?: “Juntos Podemos Más”. ¿Les suena?. Pues Maduro “valida” quien puede o no presentarse a las elecciones. Y lógicamente, esta oposición rehúsa presentarse a una tragicomedia electoral.

Y todo esto lo han generado los dos sátrapas y bocazas Chávez y Maduro, con los buenos consejos de nuestros podemitas que ahora nos quieren dar lecciones de ética, aquí en España; pero no se engañen, pues en Venezuela existe una élite, adulona y lambeculos con el poder, que vive fantásticamente bien y que algunos aún se permiten hacer buenos negocios, ya sea con el petróleo que regalan a Cuba, con la droga o con los chiringuitos que se han montao y bien; ¿Para cuándo la intervención de sus cuentas en el extranjero?. Eso sí, al que se oponga, ¡A la cárcel!, como buenos leninistas-troskistas y como hace Putín con todos aquellos que asoman la cabeza, a los que se la corta de forma inmisericorde. ¡El leninismo-troskista es así y así lo han practicado o practican Lenin, Stalin, Pablo Iglesias, Chávez, Maduro, Putin, Kim Jong-un, etc…!

Y lo que les faltaba a los venezolanos es que Zapatero, quien hizo en su día buenos negocios con Chávez, ahora se conchabe con Nicolás Maduro para insuflarle barniz internacional de demócrata, bien instalado en su residencia presidencial, mientras la oposición venezolana clama desde las inmundas cárceles. ¿Dónde está la voz de los podemitas?; ¿Qué piensa Pedro Sánchez del papelón de su amigo Zapatero?. ¡Qué indignidad!.

Y deseo finalizar este inmundo retrato venezolano, parodiando alguno de los versos de Paloma San Basilio:

No llores por mí, Venezuela
Mi alma está contigo 
Mi vida entera te la dedico 
Mas no te alejes, te necesito