
Queremos una CEOE cántabra, limpia, y sin sospechas
Parece que la rebelión contra Ferrán triunfa en Madrid, mientras en Cantabria las espadas siguen en alto y la rebelión solo existe en los bares porque pocos son los que a la cara dicen que queremos una CEOE que sea la casa de todos y no entrar en Rualasal con miedo, que te miren con sospecha y que te pregunten a qué vienes.